sábado, 26 de mayo de 2012

(sin título), de Juan Gelman


(Sin título)
qué lindos tu ojos
y más la mirada de tus ojos
y más el aire de tus ojos cuando miran lejos
en el aire estuve buscando:

la lámpara de tu sangre
sangre de tu sombra
tu sombra
sobre mi corazón

(Tomado del libro "Dibaxu")

martes, 22 de mayo de 2012

La enamorada, de Alejandra Pizarnik

LA ENAMORADA

esta lúgubre manía de vivir 
esta recóndita humorada de vivir 
te arrastra alejandra no lo niegues. 

hoy te miraste en el espejo 
y te fue triste estabas sola 
la luz rugía el aire cantaba 
pero tu amado no volvió 

enviarás mensajes sonreirás 
tremolarás tus manos así volverá 
tu amado tan amado 

oyes la demente sirena que lo robó 
el barco con barbas de espuma 
donde murieron las risas 
recuerdas el último abrazo 
oh nada de angustias 
ríe en el pañuelo llora a carcajadas 
pero cierra las puertas de tu rostro 
para que no digan luego 
que aquella mujer enamorada fuiste tú 

te remuerden los días 
te culpan las noches 
te duele la vida tanto tanto 
desesperada ¿adónde vas? 
desesperada ¡nada más! 
(Alejandra Pizarnik, de La última inocencia, 1956) 

viernes, 11 de mayo de 2012

Manifiesto, de Nicanor Parra


Señoras y señores 
Ésta es nuestra última palabra. 
-Nuestra primera y última palabra- 
Los poetas bajaron del Olimpo.

Para nuestros mayores
La poesía fue un objeto de lujo
Pero para nosotros 
Es un artículo de primera necesidad: 
No podemos vivir sin poesía.

A diferencia de nuestros mayores 
-Y esto lo digo con todo respeto- 
Nosotros sostenemos 
Que el poeta no es un alquimista 
El poeta es un hombre como todos 
Un albañil que construye su muro:
Un constructor de puertas y ventanas.

Nosotros conversamos 
En el lenguaje de todos los días 
No creemos en signos cabalísticos.

Además una cosa: 
El poeta está ahí 
Para que el árbol no crezca torcido.

Este es nuestro mensaje. 
Nosotros denunciamos al poeta demiurgo 
Al poeta Barata 
Al poeta Ratón de Biblioteca. 
Todos estos señores 
-Y esto lo digo con mucho respeto- 
Deben ser procesados y juzgados 
Por construir castillos en el aire 
Por malgastar el espacio y el tiempo 
Redactando sonetos a la luna 
Por agrupar palabras al azar 
A la última moda de París. 
Para nosotros no: 
El pensamiento no nace en la boca 
Nace en el corazón del corazón.

Nosotros repudiamos 
La poesía de gafas obscuras 
La poesía de capa y espada 
La poesía de sombrero alón. 
Propiciamos en cambio 
La poesía a ojo desnudo 
La poesía a pecho descubierto 
La poesía a cabeza desnuda.

No creemos en ninfas ni tritones. 
La poesía tiene que ser esto: 
Una muchacha rodeada de espigas 
O no ser absolutamente nada.

Ahora bien, en el plano político 
Ellos, nuestros abuelos inmediatos, 
¡Nuestros buenos abuelos inmediatos! 
Se retractaron y se dispersaron 
Al pasar por el prisma de cristal. 
Unos pocos se hicieron comunistas. 
Yo no sé si lo fueron realmente. 
Supongamos que fueron comunistas, 
Lo que sé es una cosa: 
Que no fueron poetas populares, 
Fueron unos reverendos poetas burgueses.

Hay que decir las cosas como son: 
Sólo uno que otro 
Supo llegar al corazón del pueblo. 
Cada vez que pudieron 
Se declararon de palabra y de hecho 
Contra la poesía dirigida 
Contra la poesía del presente 
Contra la poesía proletaria.

Aceptemos que fueron comunistas 
Pero la poesía fue un desastre 
Surrealismo de segunda mano 
Decadentismo de tercera mano,
Tablas viejas devueltas por el mar. 
Poesía adjetiva 
Poesía nasal y gutural 
Poesía arbitraria 
Poesía copiada de los libros 
Poesía basada 
En la revolución de la palabra 
En circunstancias de que debe fundarse 
En la revolución de las ideas. 
Poesía de círculo vicioso 
Para media docena de elegidos: 
"Libertad absoluta de expresión".
Hoy nos hacemos cruces preguntando 
Para qué escribirían esas cosas 
¿Para asustar al pequeño burgués? 
¡Tiempo perdido miserablemente! 
El pequeño burgués no reacciona 
Sino cuando se trata del estómago.

¡Qué lo van a asustar con poesías!

La situación es ésta: 
Mientras ellos estaban
Por una poesía del crepúsculo 
Por una poesía de la noche 
Nosotros propugnamos
La poesía del amanecer.
Este es nuestro mensaje,
Los resplandores de la poesía
Deben llegar a todos por igual 
La poesía alcanza para todos.

Nada más, compañeros 
Nosotros condenamos 
-Y esto sí que lo digo con respeto-
La poesía de pequeño dios 
La poesía de vaca sagrada 
La poesía de toro furioso.

Contra la poesía de las nubes 
Nosotros oponemos 
La poesía de la tierra firme 
-Cabeza fría, corazón caliente 
Somos tierrafirmistas decididos- 
Contra la poesía de café 
La poesía de la naturaleza 
Contra la poesía de salón 
La poesía de la plaza pública 
La poesía de protesta social.

Los poetas bajaron del Olimpo.

jueves, 10 de mayo de 2012

Autorretrato, de Nicanor Parra

Les presento a Nicanor Parra, un poeta nuevo para mí, pero ya un clásico de las letras latinoamericanas, hermano de la inolvidable Violeta.
Lástima que me compré su obra completa, la presté y no volvió más, cosas que pasan, los libros son de todos y de nadie. Esta viene un poco autorreferencial, jeje...

AUTORRETRATO

Considerad, muchachos,
Este gabán de fraile mendicante: 
Soy profesor en un liceo obscuro, 
He perdido la voz haciendo clases.
(Después de todo o nada
Hago cuarenta horas semanales). 
¿Qué les dice mi cara abofeteada? 
¡Verdad que inspira lástima mirarme! 
Y qué les sugieren estos zapatos de cura 
Que envejecieron sin arte ni parte.

En materia de ojos, a tres metros 
No reconozco ni a mi propia madre. 
¿Qué me sucede? -¡Nada!
Me los he arruinado haciendo clases: 
La mala luz, el sol,
La venenosa luna miserable.
Y todo ¡para qué!
Para ganar un pan imperdonable
Duro como la cara del burgués
Y con olor y con sabor a sangre.
¡Para qué hemos nacido como hombres
Si nos dan una muerte de animales!

Por el exceso de trabajo, a veces
Veo formas extrañas en el aire,
Oigo carreras locas,
Risas, conversaciones criminales.
Observad estas manos
Y estas mejillas blancas de cadáver,
Estos escasos pelos que me quedan.
¡Estas negras arrugas infernales!
Sin embargo yo fui tal como ustedes,
Joven, lleno de bellos ideales
Soñé fundiendo el cobre
Y limando las caras del diamante:
Aquí me tienen hoy
Detrás de este mesón inconfortable
Embrutecido por el sonsonete
De las quinientas horas semanales.